Ventajas de colocar techados de lámina
Los techados de lámina, también llamados “techos metálicos” se han convertido en uno de los materiales favoritos para la construcción de casas, negocios, bodegas y todo tipo de inmuebles. Esto se debe a sus múltiples ventajas, las cuales abarcan desde sus precios, hasta su resistencia, pasando por la ligereza que ofrece en comparación a los techos construidos con teja.
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Techados de lámina: ¿qué ventajas ofrecen?
En la actualidad, existe una amplia variedad de materiales para colocar techados y, por esta razón, muchas personas no saben cuál elegir. Los techados de lámina han sido parte de las construcciones por un largo tiempo y, con la aparición de nuevos materiales, se han subestimado sus ventajas, entre las que destacan:
Material liviano. Los techados de lámina tienen un peso aproximado de 40 kilogramos por cada metro cuadrado, cuando otros materiales incluso llegan a los 400 kg. Al ser más livianos se requiere de una inversión menor en la estructura de soporte. Sin embargo, este no es un factor determinante en su resistencia.
Resistencia. Los techados de lámina son capaces de resistir lluvias ligeras y torrenciales, granizo, vientos intensos y fuego, por lo cual se recomienda para lugares que cuentan con épocas de lluvia intensas o con ambientes adversos.
Instalación. Instalar este tipo de techado, de manera general, no es complicado ni requiere demasiado tiempo, pero también dependerá del tamaño del área que se desea cubrir. Y, de la mano con la instalación sencilla, el costo es inferior que los techados de teja de arcilla.
Conducción de calor. El techado de lámina posee una conducción de calor bastante efectiva, lo que resulta en una ventaja importante para lugares con climas fríos. De este modo, la lámina permitirá la conservación y propagación de calor en el espacio donde se haya colocado.
Periodo de vida útil. En lo que respecta al periodo de vida útil de este techado, se puede hablar de un plazo de hasta 20 años. Un techo de asfalto tiene un plazo de duración de 10 años, aproximadamente. Algunos materiales de la lámina metálica, como el zinc, acero inoxidable, cobre y aluminio, pueden durar hasta 100 años, siempre y cuando se les dé el mantenimiento adecuado.
Algunas opciones para alargar el periodo de vida útil del techado de lámina es el uso de un impermeabilizante o termoreflectante, los cuales, además de prevenir filtraciones de agua, goteras y reflejar los rayos del sol (evitando con ello el incremento de la temperatura al interior), servirá como aislante acústico. Muchas personas se resisten a colocar este tipo de techado por el ruido que ocasionará el contacto con la lluvia y la lámina, pero la solución es tan sencilla y económica como un impermeabilizante.
Amigable con el medio ambiente. Una de las ventajas más importantes de este tipo de techado es que se reciclan con facilidad, lo cual es un factor que debe ser tomado en cuenta, debido a que cada vez es más importante hacer uso de materiales que ayuden en la preservación del planeta tierra.
Debido a las ventajas mencionadas con anterioridad, los techados de lámina suponen, en el corto y largo plazo, una inversión inteligente. Contáctanos. En Esmeteva somos profesionales en la instalación de techados de lámina y contamos con el personal, equipo e instalaciones especializadas para ofrecerte un servicio de la más alta calidad.
